Esta guitarra flamenca fué construida en el emblemático taller de la calle Gravina nº7 por los sobrinos del maestro guitarrero Domingo Esteso, regentado entonces por los hermanos Faustino y Mariano Conde. Muchas fueron las figuras que pasaron por este taller demandando sus guitarras como Paco de Lucia, Melchor de Marchena, Niño Ricardo, Cepero, Juan Habichuela… y un largo etc.

La casa Conde construyó muy pocas guitarras con esta exótica madera, la mayoría en los años ’70, y son especialmente buscadas por guitarristas y coleccionistas de todo el mundo. El maestro Paco de Lucia tocó esta guitarra en el bautizo de su hijo Curro, prestada de su buen amigo Rafael Morales.

El sonido de esta guitarra flamenca es muy especial. La madera de Majagua aporta un timbre muy particular al instrumento, una profundidad preciosa en los bordones y una nitidez y potencia en los tiples realmente sorprendente. Un sonido mágico que no deja a nadie indiferente, sorprendiendo y cautivando desde el músico mas experto al menos experimentado.

La pulsación es media y la altura de cuerdas en selleta y diapasón perfecta y equilibrada, proporcionando una gran comodidad en ambas manos y facilitando la ejecución al guitarrista.

El estado de conservación es excelente y original, sin grietas ni reparaciones de ningún tipo.