Esta guitarra flamenca está construida por el guitarrero barcelonés José A. Fuentes en el año 2020, uno de los mayores exponentes del colectivo de guitarreros en Cataluña. Después de trabajar durante más de 15 años como carpintero, su pasión por la música y su talento a la hora de tratar la madera le hicieron emprender una nueva etapa como constructor de guitarras de forma autodidacta, estudiando los sistemas de construcción de grandes guitarreros de la historia como Santos Hernández, Antonio de Torres, Miguel Rodríguez… y experimentando con nuevas ideas y aportaciones que lo han llevado a ser uno de los mejores guitarreros del panorama actual. Sus instrumentos reflejan parte de su personalidad, sencillos, elegantes y minimalistas huyendo siempre de los excesos de decoración y utilizando para su construcción maderas minuciosamente seleccionadas y con un largo proceso de secado y curación.

Las maderas de esta guitarra flamenca son de la más alta calidad existente. La tapa de cedro canadiense presenta un veteado muy marcado, recto y uniforme en toda su superficie, los aros y fondo son de un ciprés de una belleza y calidad excepcionales.

Esta guitarra flamenca es sencillamente espectacular en todos los sentidos. Hace unos meses tuvimos una guitarra del constructor Miguel Rodríguez del año 1975, posiblemente la mejor guitarra de cedro y ciprés que ha pasado por nuestras manos jamás, aprovechando nuestra cercanía con José Antonio Fuentes y siendo conocedores de su pasión y dedicación al instrumento, lo llamamos para que se acercara y pudiese hacer un estudio en profundidad. El resultado de ese estudio es esta guitarra, una autentica obra de arte que nos demuestra una vez más que estamos ante uno de los mejores guitarreros de nuestros tiempos.

Su sonido, potente y rápido, derrocha calidad y personalidad, con un carácter flamenco llevado al extremo en el que encontramos unos bordones con el equilibrio perfecto entre brillo y profundidad y unos tiples con un timbre abierto y repleto de matices.

Esta guitarra tiene la tan apreciada pulsación “de rebote” en la mano derecha combinada con una suavidad espectacular en la mano izquierda, consiguiendo el “instrumento perfecto” para pasar horas y horas tocando sin cansarse y con una agradable sensación de facilidad.

El estado de la guitarra es nuevo.