Esta guitarra flamenca fue construida en el emblemático taller de la calle Gravina nº7 por los sobrinos del maestro guitarrero Domingo Esteso, regentado entonces por Faustino y Mariano Conde. Muchas fueron las figuras que pasaron por este taller demandando sus guitarras como Paco de Lucía, Melchor de Marchena, Niño Ricardo, Cepero, Pepe Habichuela… y un largo etc.

Esta guitarra flamenca es un encargo especial del guitarrista y flamencólogo Joaquín Rojas a la casa Conde, es un instrumento único e irrepetible construido con unas maderas de calidad superior.

Está construida con unas maderas de excelente calidad imposibles de conseguir en la actualidad. Un palosanto de Brasil para aros y fondo de tono achocolatado con unas aguas preciosas y una tapa armónica de cedro canadiense con un veteado rectilíneo y uniforme, otorgan a esta guitarra esa calidad y carácter típicos de la popular firma en esta época.

El sonido de esta guitarra es excelente y con un timbre muy flamenco, los bordones tienen una fuerza y profundidad increíbles, los tiples son dulces y cristalinos, con un sustain y proyección sin igual, los armónicos que desprende son realmente mágicos, en definitiva, un sonido perfecto que nos hace comprender el respeto y admiración que despierta esta firma en el mundo de la guitarra.

La pulsación de esta guitarra flamenca es media, la altura de las cuerdas en la selleta y diapasón muy equilibrada, siendo muy cómoda para ambas manos y aportando una gran facilidad de ejecución al guitarrista.

El estado de conservación de esta guitarra flamenca es excelente y original, tan solo presenta una pequeña fisura situada en la parte inferior del fondo que resulta prácticamente inapreciable a la vista y que está perfectamente reparada y documentada en las imágenes adjuntas.