Esta guitarra flamenca está construida por el joven guitarrero Jerónimo Pérez de Algodonales (Cádiz) en el año 2024. Este artesano ha conseguido, en un corto espacio de tiempo y por méritos propios, ser reconocido como uno de los constructores con mayor proyección gracias a sus instrumentos, donde se unen una cuidadosa y esmerada construcción junto a un sonido de gran calidad y con personalidad propia, consiguiendo que guitarristas de la talla de Antonio Rey, Paco Cepero, Diego del Morao, Miguel Salado, Bolita, Jesús Guerrero, Antonio Moya… etc. hayan acudido a su taller en busca de una de sus guitarras.

La guitarra está construida con unas maderas de una calidad y belleza inmejorables, la tapa presenta un veteado rectilíneo y uniforme con espejuelo en toda la superficie de la misma. Los aros y fondo son de palosanto de Madagascar de veta recta y con unas tonalidades preciosas, que aportan a la guitarra una gran belleza y elegancia.

Su sonido, su pulsación, la facilidad para adaptarse a ella, hacen que se pueda subir al escenario con ella nada más recibirla. Su rasgueo y el perfecto equilibrio de sus bordones en cuanto a profundidad/brillo son excepcionales y con un timbre flamenco insuperable. Los tiples brillantes, precisos y con una variedad de armónicos sorprendente.Esta guitarra flamenca es la definición materializada del termino “guitarra de concierto”, lo tiene todo. Jerónimo ha conseguido reunir todo lo que se le puede pedir a una guitarra flamenca de concierto en un mismo instrumento, un instrumento con un sonido grande y con un timbre flamenco muy personal e inconfundible que nos hacen situarlo como uno de los mejores artesanos de esta nueva y prolífica generación.

La pulsación es media, con una altura de cuerdas en selleta y diapasón muy reducida. La altura en el traste 12 es de 2.2 mm, esto consigue que la mano izquierda desarrolle su trabajo de forma extremadamente sencilla y fluida.

El estado de esta guitarra flamenca es nuevo.