Guitarra flamenca Víctor Quintanilla 10/2020

Esta guitarra flamenca está construida por el maestro guitarrero Víctor Quintanilla en el año 2020. Víctor Quintanilla es un guitarrero afincado en Mijas, un precioso y pintoresco pueblo de la provincia de Málaga. Víctor estudió carpintería en la antigua Escuela Franco (ahora IES La Rosaleda), hasta que sus tutores le pusieron en contacto con el maestro de la escuela de luthería malagueña, José Angel Chacón, donde descubrió su verdadera vocación: la guitarra. Destacar también la influencia directa en su trabajo de uno de los guitarreros más destacados internacionalmente en la actualidad como es Daniel Chiesa, esto le ha servido para mejorar en su trabajo y tener un punto de vista más profundo sobre el instrumento. En el año 2019 fue galardonado con el primer premio del III Concurso Internacional de Construcción de Guitarras Antonio Marín Montero de Granada organizado por la European Guitar Foundation, en la modalidad de guitarra flamenca. Al contemplar y escuchar sus guitarras llama poderosamente la atención la potencia y calidad de su sonido y la perfección y finura con la que termina cada una de ellas. Sin duda alguna, uno de los mejores guitarreros de la actualidad con el que esperamos seguir colaborando muchos años.

Para el estreno de esta nueva firma en Solera Flamenca no se nos ocurría nada mejor que hacerlo a lo grande y… aquí lo tenéis: Yerai Cortés con la guitarra de Víctor Quintanilla! (VER NOTICIA)

La madera utilizada para la construcción de esta guitarra flamenca es pino-abeto alemán para la tapa y ciprés real español para aros y fondo. La tapa tiene un veteado muy marcado, recto y uniforme en toda su superficie. Los aros y fondo están construidos en un ciprés con una calidad y belleza excepcionales.

El sonido de esta guitarra es realmente interesante; presenta una proyección excepcional, una cualidad que no suele encontrarse en la guitarra de ciprés convencional y que es mucho más habitual en guitarras de palosanto, por esta razón la guitarra de ciprés no suele ser la más apropiada para “concierto” y encaja mucho mejor en un escenario de acompañamiento. En esta ocasión encontramos una guitarra de sonido con gran amplitud de sonido, muy nítida tanto en tiples como en bordones y con una capacidad armónica extraordinaria. Cabe destacar el especial carácter que desprende en los rasgueos: un equilibrio perfecto entre brillo y cuerpo que produce una inequívoca sensación de estar ante una guitarra flamenca al estilo más puro.

La pulsación de esta guitarra flamenca es media, y la altura de cuerdas en diapasón y selleta perfecta y equilibrada, lo que aporta al guitarrista una gran comodidad en ambas manos.

El estado de la guitarra es nuevo.